Navidad en Navarra

Zugarramurdi - CC Roser Martínez
Zugarramurdi – CC Roser Martínez

Después de unos meses de arduo trabajo y no poco estrés me imaginaba un pequeño descanso navideño en algún lugar apartado. Tenía en mente montaña, frío y un buen fuego a tierra que pudiera acompañar a las charlas y copas entre amigos, y a alguna que otra partidilla al Risk. Hacía tiempo que quería ver los Pirineos de Navarra, pues junto a los del País Vasco son las únicas zonas de la cordillera que me quedaban por visitar.

Oveja peluda típica del Pirineo Navarro – Copyright Chejo
Parque Natural del Señorío de Bertiz – Hayedo –

Nos alojamos en una casa rural preciosa en Etxalar, una antigua borda navarra algo apartada del pueblo (lo de algo apartada del pueblo resultó ser donde Cristo perdió el gorro). Suelos y techos de madera, paredes de piedra y una decoración cuidada al detalle hacían de la casa un lugar especial y acogedor. Las bordas, llamadas así en los Pirineos, servían antiguamente como refugio de los pastores y para resguardar al ganado o almacenar productos como el heno. Normalmente constaba de dos plantas: la planta baja para los animales y la segunda planta para los utensilios y productos agrícolas. Con el boom del interés por el turismo rural, muchas de esas bordas se transformaron en acogedores hoteles o casas rurales. A continuación dejo el link de la casa en la que estuvimos: http://www.iguzkiagerreko.com/virtual.html

Iguzkiagerreko Borda - Copyright Ana Martínez
Iguzkiagerreko Borda – Copyright Ana Martínez
Iguzkiagerreko Borda - Copyright Ana Martínez
Iguzkiagerreko Borda – Copyright Ana Martínez
Iguzkiagerreko Borda - Copyright Roser Martínez
Iguzkiagerreko Borda – CC Roser Martínez
Iguzkiagerreko Borda - Copyright Montse López
Iguzkiagerreko Borda – Copyright Montse López

Etxalar

El primer día que llegamos, ya por la tarde, dejamos todos nuestros bártulos en la casa y después de probar un poco la comodidad de los sillones del comedor bajamos a cenar al pueblo. Etxalar era un pueblo típico del Pirineo navarro, muy limpio y cuidado, en el que no podía faltar su antigua iglesia en el centro del mismo. Por lo que había leído en alguna guía es uno de los pueblos mejor preservados del Valle de Bidasoa, conocido además por las estelas funerarias discoideas que rodéan su iglesia. Pasear por sus calles era agradable, pues además de disfrutar de su arquitectura típica, el pueblo está enclavado entre bosques sobre los que planea la niebla, y junto a un río cuyo sonido nos acompaña mientras caminamos.

Etxalar - Estelas funerarias - CC Zigor Belaustegigoitia
Etxalar – Estelas funerarias – CC Zigor Belaustegigoitia
Etxalar en invierno - Copyright Roser Martínez
Etxalar en invierno – CC Roser Martínez
Etxalar - Copyright Roser Martínez
Etxalar – CC Roser Martínez
Etxalar – CC Zigor Belaustegigoitia
Etxalar

Zugarramurdi

El segundo día decidimos dedicarlo a visitar un lugar famoso por sus leyendas sobre magia y brujería, un sitio recóndito, al que todavía hoy es difícil acceder: Zugarramurdi. De aquí salieron algunos de los últimos condenados por brujería en España, en un juicio que se llevó a cabo en Logroño y se alargó del 10 de Junio de 1608 al 8 de Noviembre de 1610. El episodio se desarrolló en un escenario que proporcionaba varios elementos para hacer volar la imaginación y la creencia en toda clase de supersticiones. Uno de esos elementos que hacía especial a Zugarramurdi era su gran cueva subterránea, la llamada Catedral del Diablo, atravesada por un río llamado Infernuko Erreka o “Regata del Infierno”. María, una joven del pueblo, empezó a contar a sus vecinas que había asistido a unos extraodinarios aquelarres en Zugarramurdi. Emigrante durante unos años en la localidad francesa de Ciboure, había presenciado una caza de brujas llevada a cabo por el inquisidor Pierre de Lancre. Quizá este detalle ayudó a su imaginación. Su historia se complicó cuando empezó a dar los nombres de otros asistentes, en una espiral brujomaníaca que tuvo graves consecuencias para los habitantes del pueblo. Según la página oficial del Museo de las Brujas de Zugarramurdi:

Como resultado de la intervención de los inquisidores fueron encausadas 53 personas de la comarca, que fueron llevadas a Logroño. La mayoría de ellas murieron en las cárceles o en el camino. El 7 de noviembre de 1610 se celebró el Auto de fe y, como resultado del mismo, 21 arrestados fueron acusados de delitos menores, 21 fueron perdonados y 11 condenados a la hoguera (6 en persona y 5 en efigie, junto con sus restos mortales), habiendo sido quemados el domingo 8 de noviembre de 1610”.

Desde la entrada de la cueva de Zugarramurdi - Copyright Roser Martínez
Desde la entrada de la cueva de Zugarramurdi – CC Roser Martínez
Cueva de Zugarramurdi - Copyright Ana Martínez
Cueva de Zugarramurdi – Copyright Ana Martínez
Cueva de Zugarramurdi y Regata del Infierno - Copyright Montse López
Cueva de Zugarramurdi y Regata del Infierno – Copyright Montse López
Paseando alrededor de las cuevas de Zugarramurdi - Copyright Roser Martínez
Paseando alrededor de las cuevas de Zugarramurdi – CC Roser Martínez

Parque Natural del Señorío de Bertiz

Al día siguiente de visitar Zugarramurdi, 31 de Diciembre, habíamos programado una visita guiada por el Parque Natural del Señorío de Bertiz. La verdad es que resultó una manera genial de pasar la última mañana del año, una experiencia muy especial gracias a nuestro guía Juan Goñi. Mientras recorríamos el parque natural nos explicó con gran pasión una multitud de cosas sobre el bosque y sus habitantes, contadas de una forma que te permitía ver con otros ojos aquellos árboles y todos los elementos de la naturaleza que nos rodeaban. Aunque no seáis profanos en lo que a naturaleza se refiere, recomiendo fervientemente una visita guiada igual a la que hicimos. A continuación dejo el link donde figuran los datos de contacto:

https://www.facebook.com/navarraalnatural/

Parque Natural del Señorío de Bertiz - Copyright Montse López
Parque Natural del Señorío de Bertiz – Copyright Montse López
Caminando por Bertiz - Copyright Montse López
Caminando por Bertiz – Copyright Montse López

Es invierno, los árboles están totalmente desnudos, pero cada época del año tiene su qué. De todas maneras, me quedé con ganas de ver las hayas trasmochadas de los bosques de Bertiz en todo su esplendor. Dicen que se parecen a los bosques de los cuentos, allá donde moran hadas y toda clase de personajes mágicos. Tampoco vimos a Basajaun, el Señor del Bosque en la mitología vasca, un ser enorme con forma humana y largas melenas, sabio y protector. Otro año será…

¡FELIZ 2013!

7 respuestas a “Navidad en Navarra”

  1. Me ha encantado tu artículo. Espectaculares las fotografías de Etxalar y del Parque Natural del Señorío de Bertiz. No conozco mucho de navarra pero después de ver este artículo creo que se merece una escapada. ¿Que época me recomiendas para visitarla?

    1. Muchas gracias por tu comentario Andy. La verdad es que sólo he visitado Navarra en invierno, una época que me encanta porque puedes pasear abrigado y pasar las noches al lado de un fuego a tierra. Pero supongo que cualquier momento es bueno para hacer una escapada por esos lares 🙂

    2. Me parece espectacular el lugar y además esta también documentado a nivel texto y fotos k es como estar visitándolo.
      Además como no, te quedas con las ganas de visitarlo y lo pones como uno de los lugares k quieres visitar próximamente.
      Un abrazo Roser

  2. Continua este buen trabajo.Contiene un enfoque impresionante sobre
    el tema y los comentarios son bastante acertados.

    1. Gracias Daniel. Espero volver por la zona. Saludos!

  3. nunca visite ese lugar es facinante me gustaria conocerlo,y descubrir paisajes nuevos

    1. La verdad es que es una zona que vale la pena.
      Un Saludo!

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